Uno de los restos de elementos antiguos que alberga la Iglesia de la Asunción de Santa Coloma es una enigmática y venerable construcción muy primitiva conocida como el martiryum de Santa Coloma o “La Cueva», antigua ermita sobre la que se construyó. Los “martiryum” eran edificaciones religiosas construidas para dar testimonio de la fe cristiana acogiendo el sepulcro de un mártir.
En su estructura tiene paralelos y técnicas constructivas comunes de edificios de tiempo romano, paleocristiano, mozárabe, visigodo y musulmán por lo que es difícil concretar su cronología. La cronología del edificio, en su resultado final, es del siglo X, pero en él hay partes del II-III y se averiguan modificaciones en el siglo V.
Los edificios que completarán en su momento el centro religioso alrededor del martyrium se perdieron por destrucción natural y en su momento fueron repuestos. De ellos queda la actual iglesia, edificada en el siglo XVI a partir de otros edificios existentes que se citan en las escrituras de la época.